HISTORIA DE VESPA
Vespa nace como producto de la compañía Piaggio,
empresa creada en el año 1884 y dedicada al sector del transporte. Inicialmente,
su principal dedicación eran accesorios navales para los constructores de
barcos, de acuerdo a las exigencias de los tiempos, la empresa comenzó a
diversificar su producción hacia otros medios, tales como el ferrocarril.
Durante la Primera Guerra Mundial, Piaggio trabajó para la maquinaria militar,
circunstancia que fue aprovechada para diversificar aun más su capacidad como
empresa, ampliando ésta al campo de la aeronáutica.
Las premisas del diseñador son sencillas y geniales a
partes iguales: tenía que ser una máquina para la gente que, como a él, no le
gustaran las motos: que se montara fácilmente, de conducción sencilla, que no
manchara las manos ni los pantalones del conductor, toda la carga de la moto
tendría que soportarla la carrocería, descartando el sistema de tubos, llevar
además una rueda de recambio, de manera que incluso un motociclista sin
conocimientos de mecánica pudiera solucionar el problema de un pinchazo. En
resumen: una máquina lo más sencilla y práctica posible.
Todo esto tomó cuerpo en un diseño único, teniendo muy
en cuenta la ergonomía de la conducción. Su forma abombada en la parte trasera
es realmente una herencia de la aeronáutica, ya que de esta manera se consigue
una mayor refrigeración del motor. Enrico Piaggio dijo
cuando lo vio que le parecía una avispa (de ahí el nombre).
Así habría nacido la Vespa, bautizada con el
nombre preciso, pues alude a un insecto simpático, individualista, independiente,
amante de la naturaleza, pero también peligroso e improductivo, pues no fabrica
miel. Se mueve velozmente, sin pausa, por todas partes, casi interpretando
aquello que dice la etimología misma de la moto, proveniente de to scoot
(marcha, escabullirse).
Por fin, a las 12 horas del 23 de abril de 1946,
Enrico Piaggio registra en la oficina de patentes de Florencia los
planos de una motocicleta de complejo racional de órganos y elementos con
chasis combinado, guardabarros y carrocería recubriendo toda la parte mecánica.
La Vespa había nacido.
Tanto el sistema de fabricación
(sin chasis) como los sistemas de amortiguación (el tren delantero era y sigue
siendo una copia a escala del tren de cola del bombardero Piaggio P-108, uno de
los diseños más revolucionarios de la Segunda Guerra Mundial), como el propio
motor (inspirado en los motores auxiliares de avión), como el sistema de
refrigeración por turbina y aire forzado, como la transmisión directa sin
cadenas, cardan ni correas pues en aviación, como bien sabes, huir del peso es
algo fundamental, como el mencionado y peculiar reparto de pesos en busca del
centro de gravedad ideal...
La Vespa forma parte de la historia italiana
para todos los efectos, partiendo por sus orígenes que la situaron como un
ejemplo de estrategia de reconstrucción. Enrico Piaggio poseía una empresa
destruida por la guerra y del todo inadecuada a los nuevos tiempos de paz. Sus
perspectivas, en un país con una economía inexistente, eran casi nulas. Pero la
Vespa fue su verdadero gran descubrimiento: un vehículo para el transporte
urbano y también para un pequeño viaje; era la solución individual al problema
de la movilización; era la miniatura de posesión motorística, que en otras
partes se realizaba con otros medios.
En la creación de este muy amado y altamente
apreciado objeto combinan estrechamente valores sociales, políticos y técnicos,
rodeado todo ello de altas presiones industriales.
La Vespa es la antimoto; el
avioncito que nunca vuela.
la Vespa tiene un equilibrio un tanto
extraño por su peculiar reparto de pesos (motor lateral) pero esto está en gran
parte corregido debido a que en la Vespa las ruedas no pisan exactamente la
misma línea sino que la delantera pisa más desplazada a la derecha que la
trasera. Las ruedas no pisan exactamente verticales sino que cada una tiene una
convergencia diferente que contrapesa la tendencia a irse hacia la izquierda de
la moto. Por otro lado, la disposición de toda la moto hace que
inconscientemente el piloto se siente desplazado igualmente hacia la izquierda
compensando el centro de gravedad.
Su forma abombada, que evoca cierto gusto streamline, responde en realidad a
precisas razones aerodinámicas, ya que orienta el flujo de aire destinado a la
refrigeración del motor, forzándolo a circular siguiendo una curva que lo
deriva hacia el motor. La poética de las formas aerodinámicas de la Vespa
expresa, más que una especie de adhesión a cierta retórica de la velocidad, es
decir, un enfoque de clara procedencia aeronáutica.
En resumen: la Vespa es un pequeño y
gracioso compendio de técnicas aeronáuticas adaptadas a las dos ruedas con
sobrado y reconocido éxito.
Por otra parte la Lambretta y muy a pesar
de que basaran en ello su publicidad no son más estables que las Vespa debido a
que su centro de gravedad no está centrado sino que se halla muy elevado cosa
esta que no es fácil de compensar. Son motos carenadas (más o menos según
versiones) pero que no son precisamente y debido a sus pequeñas ruedas un
prodigio de estabilidad.
Conclusión: Vespa y Lambretta son
exactamente igual de inestables (cada una en su estilo).
VESPA EN ESPAÑA
Es en el año 1949 cuando Piaggio comienza a conceder
licencias para la fabricación de Vespa por todo el mundo, y será en 1951 cuando
se inicien las obras para la factoría de Vespa España S.A., la inauguración no
sería hasta el 25 de febrero de 1953: ese día sale de la nueva fábrica la
primera Vespa española, que era un modelo 125 cc., con una velocidad máxima de
75 km/h. y un precio de 16.500 pesetas, esto es, unos 100 euros actuales. La
producción diaria de la fábrica en su debut era de 8 unidades. Con la concesión
de licencias, es el verdadero boom de Vespa en el mundo, llegando a alcanzar un
millón de unidades de Vespas vendidas, a los 10 años de haberse puesto a la
venta. Es la primera motocicleta en alcanzar este récord.
En la factoría madrileña, partiendo del modelo 125
cc., se divide en dos versiones: Vespa N (Normal) y Vespa S (Sport), con medio
caballo más de potencia que la primera. La novedad está en que el faro pasa del
guardabarros al manillar.
En 1958 se sigue trabajando en estos dos modelos,
haciéndose el modelo N con dos sillines independientes y el modelo Sport con
sillín biplaza, con la rueda de repuesto paralela entre las piernas del
conductor, entre el sillín y el escudo. Con estos modelos, se alcanzó una
producción anual de más de 25.000 unidades, comenzando la exportación a
Colombia. Es la fiebre Vespa: se reciben más de cien peticiones diarias, se
cubre la Vuelta Ciclista a España en Vespa, la Guardia Urbana de Barcelona se
equipa también con ellas, y en los Estados Unidos Vespa da incluso nombre a
cigarrillos y fósforos. Es el medio de transporte ideal por su agilidad, fácil
manejo y limpieza, ya que permite ir con traje y corbata sin mancharse.
En 1959, se adapta el sillín biplaza al modelo N y el
cambio de 4 velocidades al modelo S. A los seis años de su implantación,
existen 45 Vespa Clubs en todo el Estado. Serán años de crecimiento imparable,
con una cuota de mercado indiscutible: en 1961 el 67% de los escúters son
Vespa, año en el que sale al mercado el modelo Vespa 150: en 1964 más de 35.000
unidades vendidas…
Motor de 5cv (5.000 rpm)
3 velocidades
Depósito
combustible: 6 litros
Velocidad
máxima: 70 km/h
Consumo: 2,5
l/100 km
Sillín individual
en voladizo y opcionalmente una posterior para acompañante.
Amortiguadores
hidráulicos doble efecto...
Suspensión
trasera renovada.
Faro con
visera antideslumbrante.
Conmutador
de luces renovado.
Nuevo manillar "aerodinámico" con faro
integrado (los cables de mando van por dentro).